La Secretaría de Asuntos Agrarios del Partido Justicialista orden nacional, encolumnado en la figura de Cristina Kirchner, realizó una nueva reunión en la sede partidaria donde trazó un crudo diagnóstico de las políticas de Javier Milei para el agro.
El encuentro de la secretaría que conduce el exministro de Agricultura, Julián Domínguez, forma parte de la construcción de una agenda común para el desarrollo del Sistema Agropecuario y Agroindustrial Argentino (SAA) con vistas a la elección nacional de 2027.
Además del exministro de Asuntos Agrarios de la provincia de Buenos Aires, Alejandro "Topo" Rodríguez, participaron Ana Córdoba (INTA – La Rioja), la Ing. Agr. Arianna Rodríguez (UBA), los veterinarios Marcelo Acervo y Luis Ambró (UBA), Juan Manuel Rossi (cooperativismo), el diputado Luis Basterra, entre otros referentes del país.
Los resultados catastróficos de la gestión Milei para el campo
“Pasaron más de 500 días del gobierno de Milei y sus medidas con respecto al Sistema Agroalimentario Argentino solo han comprendido la eliminación de recursos institucionales, técnicos y financieros al sector” afirmaron desde el PJ.
En ese sentido, explicaron que “La política económica por medio de la cartera económica, en combinación con el proceso de desregulación que encabeza el ministro Frederico Sturzenegger, ha generado ya la disrupción de las cadenas de valor agroalimentarias, fenómeno que se acelerará si no se producen cambios en ambas áreas de la gestión gubernamental”

“Durante el encuentro sintetizamos los efectos negativos que conlleva la política del gobierno de Milei sobre las diferentes cadenas de valor del Sistema Agropecuario y Agroindustrial Argentino. Esta situación pone en grave riesgo su sostenibilidad y nos enfrenta a una agenda urgente ante un nuevo ciclo de desaparición de productores, producciones y agroindustrias, con impactos profundos en el empleo rural y el desarraigo de miles de familias vinculadas al territorio” agregaron.
La crítica situación de las cadenas productivas
- Limón: esta producción atraviesa una crisis histórica que amenaza su sostenibilidad con una caída del 10% en la producción respecto al ciclo anterior. A esto se le suma que las importaciones de limones aumentaron un 2.745% interanual en marzo de 2025 (EEAOC 2025).
- Yerba Mate: la producción de hoja verde en el primer trimestre de 2025 cayó más del 30% y el volumen procesado disminuyo un 21,2%. Mientras que las exportaciones se desplomaron un 36,7% y el consumo interno se redujo significativamente.
- Uva: por la caída del consumo interno en las últimas dos campañas se desequilibraron los stocks vínicos, lo que presionó a la baja los precios pagados a los productores por uva y vino a valores inferiores a la temporada anterior, con un incremento del 100% en los costos de producción.
- Peras y manzanas: este sector atraviesa una fuerte suba en los costos de producción, fundamentalmente en insumos y servicios. Las importaciones crecientes de Chile, junto con la fuerte caída de exportaciones (Rusia) y la imposibilidad del mercado interno para absorber 40 millones de kg de frutas, produjo que una alta cantidad de lotes no fueran cosechados por sobrestock y se observó el abandono de las superficies sembradas.
- Pesca: la actividad económica de la pesca enfrenta una situación crítica. La rentabilidad del sector, en particular, la del conjunto de barcos fresqueros y plantas elaboradas en tierra, se sitúa en terreno negativo como consecuencia de la combinación de ingresos deprimidos y el encarecimiento de los costos.
- Carne: en los primeros 12 meses de gestión del gobierno de Milei la actividad en el sector cárnico registró una caída significativa: la faena se redujo un 6,3% y la producción de carne vacuna cayó un 5,5% en comparación con el mismo período del año anterior. El consumo de carne vacuna alcanzó el nivel más bajo de la historia argentina, 46,88 kg/hab/año, lo que representa una reducción del 12,6 % respecto al último año del gobierno anterior y una caída de casi 6 kilos por habitante (IDAA 2024).
- Lácteos: el sector lácteo cayó un 11,2% en comparación con el mismo período del año anterior, alcanzando los 168 litros por habitante por año. Este valor constituye uno de los dos más bajos de la historia argentina, apenas por encima del registrado en la crisis de 1990 y muy por debajo de los 182 litros por habitante por año que recomienda la FAO-OMS para una dieta saludable (IDAA 2024).
- Maquinarias agrícolas: la industria nacional de maquinaria agrícola registra una fuerte caída, producto de la apertura indiscriminada de las importaciones (especialmente de maquinaria usada), generando preocupación en la industria local, que teme por la competencia desleal y el alto impacto en el empleo local.