

El Gobierno argentino oficializó la desafectación de 41 hectáreas pertenecientes al Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria en Cerrillos, una de las estaciones experimentales más relevantes del Valle de Lerma.
La medida fue publicada en el Boletín Oficial mediante la Resolución 88/2025 de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE), bajo el argumento de que los terrenos resultaban “innecesarios” para el organismo de investigación.
Se trata de una fracción agrícola sin edificaciones, ubicada al norte de la Circunvalación Sur, actualmente destinada a cultivos de soja y maíz, y separada del núcleo principal de la Estación Experimental Cerrillos.
La resolución aclara que parte de la superficie está atravesada por una servidumbre vinculada al gasoducto Cobos-Boroquímica, lo que restringe las posibilidades edilicias en franjas de hasta 7,5 metros del tendido.
En agosto de 2024, la Provincia de Salta firmó un convenio con Nación para destinar esas tierras a proyectos habitacionales, recordó ElTribuno.com. Con la desafectación formalizada, la jurisdicción provincial podrá avanzar en ese plan. Sin embargo, especialistas advierten que sin una planificación integral podrían repetirse casos de urbanización desordenada, como ocurrió con el ex asentamiento Parque La Vega en la capital salteña, donde la presión inmobiliaria y la falta de servicios derivaron en un grave problema urbano.
El traspaso no estuvo exento de cuestionamientos. Dirigentes rurales y voces académicas señalaron que la desafectación se realizó sin la intervención del Consejo Directivo Nacional del Inta, órgano que debería autorizar este tipo de cesiones.
Si bien un informe solicitado por el Senado a la AABE a mediados de año mencionaba un acuerdo del organismo para liberar la fracción, persiste el malestar por lo que se percibe como una decisión tomada de manera unilateral.
La polémica se intensifica en un contexto electoral. Sectores políticos y sociales temen que la cesión se utilice como moneda de negociación, tal como ocurrió en 2012 con terrenos expropiados en la zona sur de la ciudad de Salta. Aquella experiencia derivó en un descalabro urbanístico y especulativo en la Finca La Vega, donde los lotes fueron entregados sin planificación previa para cubrir necesidades inmediatas de campaña.
Hasta que se concrete la transferencia, el INTA seguirá a cargo de la custodia del predio. No obstante, el futuro de las 41 hectáreas de Cerrillos ya parece definido: se orientarán a proyectos habitacionales. La gran incógnita es si el nuevo avance urbano responderá a una planificación seria o si, como temen en la región, se repetirá la improvisación de experiencias pasadas.
Otro inmueble desafectado en Buenos Aires
La misma resolución incluyó un segundo inmueble estatal, en este caso bajo jurisdicción del Instituto Nacional del Agua (INA), ubicado en Ezeiza, provincia de Buenos Aires. Se trata de un predio con maquetas hidráulicas y construcciones en desuso, que también fue declarado “innecesario” y permanecerá bajo custodia del organismo hasta que se defina su nuevo destino. (NAP)