“Es un nuevo golpe a la producción porcina, que se suma al daño provocado por las importaciones de cortes realizadas al tipo de cambio oficial, que distorsionan aún más el mercado interno, y los saldos técnicos de IVA que tienen los productores nacionales y no pueden recuperar”, afirmó la Federación Porcina Argentina en un comunicado.
En el texto recuerdan que la medida tomada actualmente, similar a la adoptada en septiembre y en diciembre del año pasado, es realizada en un contexto de escasez de producción nacional de granos por la sequía. “Esto significa que a las dificultades para conseguir harina de soja se le sumará la suba de precio y el aumento de su precio que hace crecer el costo de producción en al menos un 10%“, anticiparon.
Por otro lado, la Federación Porcina Argentina denuncia que “hasta el momento no han sido pagadas las compensaciones que el gobierno anunció en enero de este año, como paliativo por el ‘dólar soja 2’ de diciembre”.
Finalmente, cuestionan que “este tipo de parches macroeconómicos generan una distorsión enorme en la economía y castigan a sectores como el porcino que en 2023 viene creciendo un 12,3%, agregando valor en origen y creando trabajo genuino en el en el país”.