El Gobierno de Javier Milei avanza con su brutal ajuste y comenzó una nueva ola masiva de despidos, que podrían llegar a más de 70.000 trabajadores expulsados de la administración pública. A poco más de 100 días de haber asumido, el gobierno libertario podría desguazar organismos clave para el sector agropecuario, la producción y las exportaciones nacionales como el INTA y el SENASA.
En este marco, en la víspera del fin de semana santo, funcionarios de la secretaría de Agricultura comenzaron a implementar el plan del ministro de Economía, Luis Caputo, con una tanda de 400 despidos en la Sede Central de Avenida Paseo Colón. Dispusieron vallados y hasta movilizaron efectivos de policía en las inmediaciones.
Entre los despedidos, se encuentran trabajadores con 30 años de carrera en el Estado, profesionales, mujeres embarazadas y personas a punto de jubilarse. Algunas de las áreas más afectadas son Informática, Recursos Humanos y distintas oficinas dependientes de la extinta Subsecretaría de Administración. Los gremios ATE y UPCN iniciaron un plan de resistencia y lucha, que no descarta la toma pacífica de oficinas.
Por otro lado, distintos actores del sector agropecuario presionan al Gobierno Nacional para que el impacto sea mucho menor en INTA y SENASA, ya que el desguace de esos organismos impactaría de forma directa en la producción y exportaciones del país. Hay negociaciones abiertas para que no se llegue a las cifra de 3.000 despidos en los entes descentralizados.