"Detrás de cada historia hay una injusticia que no podemos dejar pasar. Por eso, estuvimos desde el primer momento acompañando Víctor, y se realizaron las inspecciones correspondientes junto al RENATRE. Como este caso, hay tantos otros que se viven en la provincia y el país”, señaló Natalia Sánchez Jauregui, secretaria de Organización de la Unión Argentina de Trabajadores y Estibadores Rurales (UATRE), sobre el caso de Víctor Díaz, un trabajador rural de San Vicente, despedido sin causa. El testimonio se difundió en medios de comunicación y generó una fuerte repercusión.
“Hoy, en cada operativo de fiscalización que realizamos, encontramos lo que muchos quieren esconder: trabajo no registrado, explotación laboral, viviendas en condiciones inhumanas, trabajo infantil y establecimientos que operan en condiciones de total peligrosidad para la vida y la salud de los trabajadores. Esa es la verdadera cara de la informalidad que algunos sectores prefieren naturalizar”.
En este sentido, Sánchez Jauregui aseguró que "el primer inspector tiene que ser el mismo trabajador que, cuando ve que no le pagan como corresponde en el recibo, no le entregan la ropa de trabajo, se acerque y denuncie lo que está sucediendo."
“Desde UATRE sostenemos con convicción la defensa de los derechos de quienes trabajan la tierra. Nuestro rol como sindicato es acompañar, denunciar, fiscalizar y pelear por condiciones laborales justas. Porque donde hay un derecho vulnerado, ahí tiene que estar UATRE, con firmeza y organización".
La exdiputada defendió al trabajador despedido sin justa causa.
La dirigente sindical también advirtió que la situación se está profundizando: “Con la Ley Bases que impulsa el gobierno nacional, lo que se hace es fomentar la informalidad. Se debilitan los controles, se flexibilizan las condiciones y se deja a los trabajadores desprotegidos frente a un mercado que solo busca maximizar ganancias sin importar a quién pisa en el camino”.
“Este modelo no incluye al trabajador. Este gobierno está decidido a sacarle derechos al pueblo que trabaja. Le da la espalda a quienes producen, a quienes levantan la cosecha, a quienes garantizan los alimentos de los argentinos. Y no lo vamos a permitir”.
“Vamos a seguir estando en el territorio, en cada campo, escuchando y defendiendo. Porque no puede haber más trabajadores invisibles y *la justicia social también se construye desde desde cada rincón rural del país”.