En lo que va de 2025, el mercado brasileño ha mostrado una fuerte demanda de peras, consolidando una tendencia de recuperación que comenzó en 2021. Las importaciones de esta fruta en los primeros 7 meses del año superaron las 106.100 toneladas, 5% más que el año pasado y el mayor volumen en diez años. Este crecimiento se atribuye en gran parte a la posición dominante de Argentina, que abastece el 89% de las peras que compra Brasil.
El dominio de Argentina se completa con el de Chile y Portugal, que juntos concentran 99% de las peras importadas por Brasil, de acuerdo a datos del Gobierno de Brasil publicados por agencias internacionales.
El éxito argentino se basa en la combinación de calidad de la fruta, capacidad logística y precios competitivos.
Manzanas
El caso de las manzanas es distinto, aunque ambas producciones comparten la misma región principal, el Alto Valle del río Negro, y comparten también mismas firmas exportadoras.
Si bien las importaciones brasileñas cayeron 15% interanual en los primeros 7 meses de 2025, el volumen sigue siendo 67% superior al promedio de los últimos 5 años. En este segmento, Chile lidera con más del 50% de las ventas. Sin embargo, Argentina ha logrado mejorar su participación, con un aumento del 12% en sus exportaciones a Brasil en lo que va de año, pasando de 17.000 a 19.000 toneladas.
En Brasil proyectan para este año un crecimiento económico de entre 1,9% y 2,5%, una inflación contenida y un tipo de cambio estable, factores que mantendrían la demanda de frutas importadas. Para Argentina, el desafío será sostener la calidad y la competitividad en un entorno global exigente.