

Por Rosa Mansilla (*)
Hace más de 20 años venimos sufriendo y padeciendo las malas políticas agropecuarias. Dialogamos con distintas gremiales y en mi caso siendo socia de Sociedad Rural Argentina, expreso a cotidiano nuestro malestar en la región. Dicen que hay hambre pero siguen empesinados algunos en la no colaboración con el contribuyente y productores. El productor pasa frío, calor y tiene su "fábrica" a cielo abierto.
Hoy el productor frutihortícola gana la mitad de su producido, es decir, no recupera su inversión total, sumándole los impuestos que debe pagar. Se propuso desde el Concejo Deliberante de La Plata exceptuar pagos impositivos a algunos productores y también armar un mecanismo de contención entre la Secretaría de Producción de la Municipalidad y el Mercado Regional que también cobra ciertos tributos. Nada de esto se puso como prioridad, lo que evitaría un impacto directo en los precios en verdulerías.
Por otro lado, desde la Provincia de Buenos Aires se iban a tomar medidas, hubo pérdidas en todos los municipios del interior, Mar del Plata por ejemplo, donde estuvimos con colegas y productores hace unos días. Nada se hizo. No se colaboró con los productores, ni si quiera en sacar las cargas tributarias.
En la capital bonaerense hubo una reunión en Junio donde se consolidó lo que llamaron Mesa de Trabajo para Fortalecer el Cordón Frutihortícola, llamaron a varias asociaciones civiles, productores y cooperativas, pero todo quedó en promesas. En julio, por heladas se perdió el 70% de la producción pero no se han tomado medidas, ni se gestaron las politicas correspondientes para el sector que lleva décadas en abandono, sobrepoblación y olvido.
Desde el gobierno de Julio Alak en La Plata y el Gobierno de Axel Kicillof, no hacen ni hicieron nada al respecto de esta situación que vivimos a diario los productores. Es desolador que sobre todo desde la provincia y el municipio no se haya dado una respuesta al cordón frutihortícola.
(*) Productora e integrante de la Sociedad Rural Argentina.